Los ritmos del negocio de la recogida selectiva de papel/cartón y los precios del material recuperado, sujetos a la demanda del mercado, son una autentica montaña rusa y lo seguirán siendo.
Por el contrario, el servicio público de la recogida selectiva de cartón, que debe cumplir con objetivos de cantidad y calidad, a los que estamos obligados los ayuntamientos, es totalmente continuo y se debe realizar con la misma eficacia y eficiencia, cuando el material recuperado tiene un valor de mercado de 3 € Tn. y cuando tiene 123 € Tn.
En ningún caso se puede mantener la actual financiación de la RAP de la recogida selectiva municipal de papel/cartón, por múltiples razones:
- Hasta ahora los envases comerciales que se adherían voluntariamente a un SIG eran absorbidos por los domésticos, cambiando, en la práctica, su carácter, y con la vigente normativa esto no procede en absoluto.
- La totalidad de la recogida selectiva de los envases de cartón comercial “puerta a puerta” no es un residuo doméstico, aun cuando lo gestione un ente local, y su gestión no puede incorporarse a convenios con SCRAP de envases domésticos.
- No procede tope máximo de peso recogido para la financiación y se deben aplicar los eficaces criterios de las Recomendaciones para el diseño de un servicio municipal de recogida puerta a puerta de papel y cartón comercial, aunque se revisen para actualizarlos, con la participación de los nuevos actores: los SCRAP de residuos comerciales.
- El contenido de envases en el contenedor azul ya no es del 40% como se concertó, en el pasado.
Los estudios realizados establecen que en torno al 75 % del contenido del contenedor azul son envases.
El estudio realizado por la Cátedra de “Economía Circular para la Gestión Sostenible de Residuos” Ayuntamiento de Fuenlabrada – Universidad Rey Juan Carlos detecto un 74 % de envases en la comparativa de la composición de los residuos de papel/cartones recogidos en el contenedor azul en 28 municipios.
De ellos, un 38% eran claramente domésticos, un 15% eran claramente comerciales y el resto eran simplemente cartón, sin identificación que pudiese aclarar su origen.
Todos estos razonamientos concluyen en que los SCRAP de envases domésticos y comerciales de forma conjunta deben afrontar la financiación de TODO el envase de cartón que se recoja por el canal municipal, asumiendo cada uno el gasto que corresponda con su cuota de mercado.
El antecedente de la aplicación de la responsabilidad del productor a los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos y la oficina de coordinación de sus SCRAP, son el antecedente, el modelo de competencia colaborativa que estudiar para ser aplicado, de forma adaptada, a los residuos de papel/cartón.
No hacerlo así y adjudicar a los SCRAP de residuos domésticos, por inercia, las toneladas de cartón actualmente gestionados por los entes locales, para el cumplimiento de sus objetivos, supondría dificultar y encarecer la gestión de los SCRAP de residuos de envases comerciales de nueva creación, obstruyendo la competencia.